SORBITO A SORBITO

 

 

 Trás el descorche de esa botella de champán,

la cual tenías reservada,

como buen previsor que eres,

tu sonrisa ya no se borró en toda la noche.

Desde el primer sorbo

ya supimos que la noche sería larga,

que no decaería,

que sería mágica e inolvidable.

La diferencia es abismal,

cuando te sientes correspondido,

tu mundo está en orden,

todo te sonríe.

A nosotros que nos gusta saborear la vida,

sorbito a sorbito fuimos saciando

nuestras ganas de estar juntos,

haciendo que el alba nos sorprenda,

proclamando un nuevo y radiante día,

haciendo que baile en nuestros ojos,

lo grato que puede ser llenar la vida,

de caricias, de besos, de mimos, de afecto,

pero sobretodo de entendimiento mútuo.

(Kanet)