Problemas, no. Soluciones.

Pintaré con las sonrisas
tu cielo de nubes negras
si cuando abras los ojitos
te visita la tristeza,
si en alguno de esos días
la esperanza va y se aleja.
Si amaneces entre lágrimas

yo te bajo las estrellas

junto a los rayos de sol

para quemar tus problemas.
Si me pones mala cara,
y ni así, te pones fea,
te doy un beso y un abrazo
y un te quiero reverbera
en el centro de tu infierno
porque así menos te quema.
Si me gritas inconsciente
yo rasgueo con las cuerdas
un acorde de la paz
y el final de la contienda.
Si tu boca es amargura,
yo pondré besos de fresa,
chocolate y avellanas,
de limón y de cereza.
Y es así porque eres tú
alma bella y compañera,
por quererme y aguantarme
y devolverme la fuerza
cuando nadaba perdido
en los mares de miseria
hasta que llegué a la orilla
de tu reino, mi princesa.